Carolyn Bessette enamoró, no sólo a John John Kennedy, sino también a toda la sociedad neoyorquina con su estilo sofisticado y minimalista made in Carolyn.
Abrigos sobrios con toques de color o estampados discretos, camisas sencillas, pantalones setenteros y en su mano siempre el bolso Birkin de Hermès son algunas de las piezas de sus looks.
Siempre nos quedarán sus maravillosas fotos por las calles de Nueva York.